Meet the Florida hosts who welcomed hurricane evacuees

Open Homes ahora es Airbnb.org

El Programa Open Homes de Airbnb se convirtió en Airbnb.org, una nueva organización sin fines de lucro clasificada como 501(c)(3). Gracias por ser de la comunidad de Open Homes junto con nosotros. Tenemos muchas ganas de que formes parte de este nuevo capítulo.

Cuando Jason y Karen se separaron durante el huracán Michael, Bob y Juan, anfitriones en Open Homes, los ayudaron a reunirse como familia.

En octubre de 2018, después de que una tormenta tropical escalara a un huracán de categoría 5 sobre la franja de Florida, Jason y Karen tomaron a sus hijos y huyeron hacia Orlando.

“Al ser de Florida, somos un poco tercos cuando se trata de huracanes”, dijo Jason, cuya familia vive en Fort Walton Beach, a 4,8 kilómetros de la costa. “En realidad, ni nos inmutamos a menos que sean categoría 3 o 4. Pero cuando este llegó a categoría 5, fue una locura. Decidimos irnos”.

“Cerraron las escuelas durante dos días, lo que es inusual”, dice Karen, quien es maestra de teatro en una preparatoria local. “Fue entonces que supimos que se trataba de algo grave. Y queríamos estar juntos, por si pasaba una catástrofe”.

El huracán Michael tocó tierra en el centro de Florida con vientos de 241 kilómetros por hora, los techos volaban, las carreteras se inundaron con agua de mar, las líneas eléctricas se cayeron y vecindarios enteros estaban en peligro. En ese momento, Jason estaba atrapado a 10 horas de distancia en un viaje de negocios y Karen estaba en casa con sus dos hijos. La familia rápidamente se dio cuenta de que los refugios cercanos estaban llenos y que los hoteles eran demasiado caros.

“Revisé mis aplicaciones de hoteles y vi que estaban reservando rápido y que los precios se estaban descontrolando, así que abrí mi aplicación de Airbnb”, dijo Jason. “Ahora es parte de nuestro plan de evacuación revisar Airbnb antes de buscar hoteles. No quieres encontrarte atrapado en las carreteras tratando de evacuar cuando llega la tormenta. Cuanto más esperes, habrás más gente tratando de evacuar”.

Cuando abrió la aplicación de Airbnb en su teléfono, una notificación le preguntó si él o su familia se habían visto afectados por el huracán. Fue entonces cuando descubrió Open Homes, un programa que conecta a las personas afectadas por desastres con alojamientos gratuitos. La casa que encontró tenía tres dormitorios y tres baños, era accesible en vehículo y estaba perfectamente ubicada para que la familia se reuniera.

Jason y Karen se encontraron en su alojamiento en Florida, justo al sur de Orlando, un lugar muy popular por su proximidad a Disney World. El alojamiento tenía una estética relajante y marina, con muebles de colores vivos y paredes de colores alegres.

Los esposos Bob y Juan abrieron su alojamiento por primera vez con el programa en 2016, y desde entonces han alojado a varias familias afectadas por los huracanes Irma y Michael. La pareja lleva casada 7 años y juntos más de una década. Bob está jubilado y administra sus propiedades y Juan recientemente lanzó un negocio de viajes orientado a la comunidad LGBT para viajar a Ecuador. Hasta la fecha, han recibido a más de 2000 personas de más de 35 países.

“Cuando llegamos, se sentía como un alojamiento lejos de casa”, explicó Karen. “Por supuesto que estábamos muy nerviosos por nuestra vivienda, pero fue agradable que nos quitaran algo de ese estrés de encima. La piscina fue una sorpresa agradable”.

Durante tres noches, la familia descansó, se reagrupó y monitoreó las noticias mientras la tormenta se intensificaba. “En una situación estresante, nos sentimos cuidados”, comenta Jason. “A través de una aplicación, de todas las cosas”.

A pesar de que Bob y Juan estaban en su casa en Fort Lauderdale, aún eran capaces de hacer una diferencia desde lejos. Juan se mantuvo en estrecho contacto con Jason y con frecuencia controlaba cómo estaba su familia. “Siempre tienes un sentido de responsabilidad por tener huéspedes en tu casa”, menciona Bob. “Aunque huyan de peores circunstancias, sigues pensando, “espero que no les pase nada”.

Jason y Karen suelen prepararse para la temporada de huracanes almacenando alimentos no perecederos y llenando la bañera de hielo y agua. “Si esperas hasta el último momento, cuando todos van a las tiendas, encuentras los estantes vacíos”, comenta Karen. “Tenemos guardados baterías, linternas y cargadores manuales que funcionan con baterías para nuestros teléfonos, en caso de que nos quedemos sin energía”.

Juan y Bob se prepararon para recibir a la familia de Jason y Karen como lo harían con cualquier otro huésped en Airbnb. “Cuando viajamos, todos queremos encontrar un lugar donde podamos sentirnos como en casa”, menciona Juan, al señalar que esta situación no era una excepción. “Un lugar limpio, donde seamos bienvenidos y que sea seguro”.

Cuando Jason y Karen regresaron a su casa más tarde esa semana, no encontraron daños significativos, pero muchas personas en su comunidad no tuvieron la misma suerte. “Tomará años recuperarse y reconstruir”, afirma Jason. “Las noticias ya no lo cubren, pero todavía hay personas cuyas casas han sido demolidas y que viven en tiendas de campo en Panama City”. Al menos 36 personas murieron durante el huracán Michael, el más destructivo de la región desde 1992.

“Hay algo gratificante en ayudar a alguien sin esperar nada a cambio”, afirma Juan. “Jason se ofreció a pagar un par de veces, pero le dijimos que no era necesario. Sabemos que estás desplazado y estamos encantados de ayudarte”.

“Si alguna vez estuviéramos en tu situación, enfrentándonos a la amenaza de un huracán, sería bonito saber que podemos contar con Open Homes”, dice.

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